miércoles, 30 de mayo de 2007

La hipocresía de la FOX...

Parece que vivir en la Costa Atlántica a los argentinos, a los brasileros y a uruguayos les produce un anhelo, un escozor donde pulula la certeza de un deseo. Estos oriundos del Atlántico aspiran, como siempre, a transformarse en la cola, en el trasero sucio de Europa. A los “hermanos” argentinos, brasileros, uruguayos la FIFA fraternalmente les debería ofrecer la imperdible oportunidad de ir a jugar la eliminatoria del Mundial 2010 a Europa. En esos escenarios, en “igualdad de condiciones”, sin altura que valga, en canchas donde abunda el Fairplay, tal vez allí seríamos testigos de observar si la potencia argentina en fútbol no es más que un mito inventado por la potencia mediática tanto de sus medios como de sus histéricos habitantes. De Uruguay no quiero hablar ya que sabemos que es más producto de una vieja historia que de una realidad futbolística (revisemos números, Uruguay es cada vez más irrelevante en el contexto sudamericano y casi ya desapareció en el contexto mundial). De Brasil festejaríamos más derrotas parecidas a las del Mundial de Alemania. ¿Se acuerdan? Francia, con un Zidane desbordando talento en la cancha, desdibujó la alegría millonaria de Ronaldhino. Sería fascinante ver hundirse a estos “grandes” del fútbol, como a un trasatlántico de lujo que transporta a una masa de auténticos decadentes que se va a pique con todas las luces encendidas en medio de gritos. Sería maravilloso, lastimosamente los tenemos que tener de vecinos. Mediocres vecinos que innovan su amor al latinoamericanismo inventando brutales sistemas de esclavitud.

Inexistente lector estoy francamente hastiado con la hipocresía de la FOX que monopoliza la exhibición del fútbol internacional. La FOX es la plataforma comunicacional del fútbol sudamericano. Sabemos que se trata de un simple brazo de ese monstruo comunicacional que es Torneos y Competencias que tiene bajo su tutela: a la Foz, a TYC, ambos exclusivos canales de cable; cuentan también con infinitos programas de fútbol, emisoras de Radio (La Red, AM, entre otras), periódicos deportivos: Olé, La Nación Deportiva; revistas como El Gráfico, la Revista Fox Sports, en fin… El monopolio está claro. También su objetivo: apoyar a Boca y a River sobre todas las cosas y cuando es posible se tiene que hablar bien del América. Para muestra revisen el discurso crítico que se arma en torno a estos clubes.


Estos señores están en una cruzada mentirosa, falsamente diplomática a favor de la AlturA. Ayer rebalso la gota de plomo que perforó el vaso de mi estúpida paciencia.

En el programa 90 minutos –que usualmente, día a día, suele llenarse la boca de la soberbia argentina futbolera– entrevistó al antiguo presentador de bloopers de nombre Patato que gracias a Wilsterman terminó de vicepresidente de la federación boliviana y presidente de la liga. Este histriónico hombre expuso varias ideas, por ejemplo que a este paso en Bolivia “nos vamos a tener que dedicar al béisbol”. Los periodistas de la mesa: Gustavo López, Sebastián Vignolo, Daniel Arcucci y un hombrecito más cuyo nombre no recuerdo, salieron en defensa de la altura: “Que es un derecho irrevocable”, “que es igual de grave jugar a 40 grados centígrados”, etcétera…. Además Arcucci contó que el médico de la selección Raúl Madero, miembro del Comité de Salud, participó proporcionando argumentos "científicos" en contra de la altura. Hasta ahí su trabajo de falsa diplomacia en apariencia era impe-CABLE.

Lo interesante es que la opinión mudó radicalmente cuando llegó el jugador de San Lorenzo, Santiago Hirsig. En otras palabras, todo el “brillante equipo Fox” vulneró la falsa diplomacia sobre la Altura y expuso su verdadera Kara.

Breve digresión:
Los dos partidos más recientes que jugó San Lorenzo en La Paz perdió rotundamente. En noviembre de 2002 en Copa Sudamericana el Bolívar le ganó 2 a 0, a un San Lorenzo ultra defensivo, dirigido por Inzúa, actual técnico de Wilstermarn y actual impulsor para dejar de jugar en la altura. En la argentina (con minúscula) el Bolívar perdió 4 a 2. En octubre de 2003 también en Copa Sudamericana el Tigre le ganó 2 a 0, a un San Lorenzo limitado de fútbol. En argentina, en el nuevo Gasómetro perdió 2 a 1 y el Tigre sacó a ese espantoso equipo argentino de la Copa.

Volviendo al programa de la Fox, Hirsig contó que cuando vino las dos veces a la altura no sólo se asfixió, sino que no pudo correr, que sintió vómitos, que tuvo mareos. En ese instante, en el set de la FOX irrumpió la típica psicosis argentina alrededor de la Altura. Vignolo preguntó: “¿Cuáles son los síntomas, Sebastián?” Como si se tratara de una plaga que se pega a los que siempre pierden no sólo en la altura, sino también en la costa, Hirsig, atrapado en un cuadro patológico de angustia, respondió: “es como cuando te levantás rápidamente de la cama y se te nubla todo, mareos, ahogo constante, y un malestar todo el tiempo... Digo si no te dijeran nada pensarías que te vas a morir... Nada agradable”. El ambiente fue propicio para que cada uno de los presentes en la mesa cuente su triste versión de su paso por la altura. Gustavo López, por ejemplo, que minuto antes defendía a la altura, salió a contar su experiencia en la Copa América del 97 donde “no podía trepar las gradas, me faltaba oxigeno”. Hirsig terminó de contar su experiencia con un dato totalmente inverosímil, contó que los jugadores de San Lorenzo en el aeropuerto de La Paz fueron transportados en sillas de ruedas. Dijo de frente que su deseo es “que no se juegue más en La Paz”.
Los periodistas de la FOX cambiaron de opinión y de semblante, ya nadie hablaba del derecho de jugar al fútbol en la altura.

La altura es una batalla muy compleja. Para enfrentarla lo primero que deberíamos hacer es enriquecer los argumentos científicos para enfrentarla y tengo mis dudas, en realidad chismes, del Instituto Boliviano de Altura. Se debería comprometer a los equipos médicos de la FIFA a que investiguen junto con los médicos de la CONMEBOL, cada uno de los partidos internacionales que se juega a más de 2500 metros. También investigar lo que pasa en el llano. Es vital hacer un largo seguimiento al fútbol en altua. Ya es hora de desmontar toda esa coraza de mitos que nublan el razonar de los deportistas argentinos, brasileros y uruguayos. Es hora de desterra a esos nefastos periodistas que apoyan en función de sus intereses. Por último, se dice que debajo de cada piedra en Argentina se encuentra un psisconalista, que trabajen pues, ya es hora de que los traten a sus compatriotas prisioneros de la psicosis de altura. Y mucho mejor si se van a jugar la eliminatoria a Europa. Demostrarían una vez más que son el patio trasero de occidente.

lunes, 28 de mayo de 2007

Nos quieren cortar las piernas CARAJO...

No se trata de una simple discriminación, ni de una exclusión momentánea o parcial es algo mucho, pero mucho más grave y, sobre todo, más perverso: la FIFA pretende echarnos, aventarnos, anularnos del mundo del fútbol. Por el momento no hay argumento que valga frente a semejante contundencia. La FIFA, por todas las señales emanadas, por la resolución asumida en el Comité Técnico busca: ACABAR con el fútbol en la altura. No somos tan ingenuos para intuir y especular que detrás de este bochorno se encuentra la Asociación de Fútbol Argentina y la Federación Brasilera de Fútbol.


La FIFA es la expresión geopolítica del fútbol. Para muestra de su poder basta observar que mientras la organización de la Naciones Unidas (ONU) tiene 197 miembros, la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) cuenta con 205. Bajo el riesgo de caer en una exageración, cabe instaurar esta analogía: si la ONU por dictamen de las potencias decidió arbitrariamente invadir a Irak, nuevamente las potencias de mayor peso dentro de la geopolítica del fútbol complotan (desde hace más de15 años) para –repito la idea– acabar con el fútbol en la Altura.

¿Con qué argumentos cuenta la FIFA? La FIFA, mediante la palabrería demagógica de su vocero Rodrigo Adriázola ostenta la absurda nada. En declaraciones hechas a Oscar Dorado en PAT en el programa Hola País, mostró que la FIFA baraja argumentos POLÍTICOS que se disfrazan con una pátina de discurso pseudocientífico:
  • “por informes técnicos se ha llegado a la conclusión que la altura tiene consecuencias sobre la salud de los futbolistas. Lo que la FIFA busca es proteger y resguardar estos efectos nocivos” [Argumento 1].

  • “por un asunto de Fairplay, de juego limpio, se exige que no se obtengan ventajas deportivas en la competencia. Se ha demostrado que la altura da ventajas” [Argumento 2].


Detrás de estos juicios apresurados, densamente políticos, hierven una cantidad variada de intereses deportivos. Es una falacia de proporciones maracanianas asumir que la “altura”, exclusivamente la altura tiene consecuencias sobre la salud, ¿qué pasa con el fútbol que se juega en la costa o en el llano? ¿Acaso los caballeros de la FIFA no recuerdan la muerte de dos futbolistas jóvenes, hace cuatro años y en competencias FIFA, Vivien Foe, de Camerún, y Miklos Feher, de Hungría, cayeron fulminados en el campo de juego? ¿Cuál era la temperatura de la cancha? ¿Cuál la altura? ¿Cuáles los índices de humedad? ¿Quién sacaba ventaja deportiva en ese contexto? ¿La televisación? ¿Los bolsillos de la propia FIFA? ¿Se acordarán estos caballeros del comité técnico de la muerte del central del Atlético Paranaense, o del jugador paraguayo que murió en medio de un entrenamiento? Al parecer las muertes de estos atletas en el llano no tienen relevancia para los archivos FIFA y sí la desesperada puesta en escena de unos jugadores brasileros en estado de asfixia a 3900 metros sobre el nivel del mar.

Bolivia como todos los países que saben de fútbol tiene que mover las fichas de tal manera que deriven en ventajas. Ventajas siempre relativas. La altura proporciona ventajas deportivas si es que ciertas variables no son tomadas en cuenta por los equipos visitantes. Jugamos en la altura con los equipos argentinos, brasileros, uruguayos hace más de 80 años. ¿Hubo algún muerto? Dentro de este contexto si hacemos un balance de los éxitos deportivos obtenidos en cancha Bolivia saldrá en déficit y no así Arentina que la única vez que salió campeón del mundo fuera de casa fue en la altura del Estadio Azteza (2400 metros). Hablemos de Ecuador y de “la ventaja deportiva” por jugar en Quito a 2800 metros. Demostró ser imbatible de local, pero también demostró en el Mundial 2006 que está muy por encima de varios equipos europeos y centroamericanos. Sin ir muy lejos, el sábado Bolivia expuso en Boston una calidad técnica, táctica, añadido a un espesor de juego mucho más significativo que el barajado por una Irlanda reducida al contragolpe y al rigor del aburrido orden.


Otra estúpida falacia demagógica es la del Fairplay. ¿A qué se refiere la FIFA cuando habla de juego limpio? Si se refiere exclusivamente a las conductas deportivas dentro de la cancha o a las condiciones topográficas que rodean a las canchas reduce el concepto de tal manera que inmuniza (pasteuriza) al agresivo ejercicio de la pasión deportiva que se expresa semanalmente en la histeria del fútbol argentino. ¿La FIFA sumó la cantidad de muertos que produce “el Fairplay” vulnerado sistemáticamente desde el epicentro de las canchas gauchas? ¿Acaso no es más peligroso para el fútbol la violencia incentivada por dirigentes, técnicos, jugadores, periodistas que los efectos manejables de la altura? Sabemos que si la mugre embarra a Brasil o Argentina la FIFA está ahí tapando orgullosa con su sucia alfombra política los bochornos que estos países producen.


La FIFA al asumir la vergonzosa decisión de prohibir el fútbol en la Altura está fragmentando su poder y exponiendo su habitual estilo fascista de decidir en función del beneficio del más poderoso. ¿Qué pretende la FIFA? ¿Será que busca clasificar la competencia deportiva en: fútbol de costa, fútbol de llano, fútbol de alta montaña? Imagínese inexistente lector: campeonato mundial de fútbol de Alta Montaña. O Copa Sudamericana de la costa. O Mundial de clubes del llano. Si a Maradona la FIFA le cortó las piernas en el Mundial del 94 a Bolivia entre líneas le están PROHIBIENDO jugar al fútbol, no sólo en instancias profesionales; en otras palabras, no están cortando las piernas a todos los bolivianos que vivimos por encima de los 2500 metros. No exagero con la analogía, la ONU cohesionó la cojuda decisión de invadir Irak y ahora la FIFA reproduciendo ese fiasco nos quiere sacar abusivamente de la práctica del fútbol. ¿Acaso esta decisión no lleva en sí un peligroso acto de violencia? ¿Acaso no se trata de una vulneración de los derechos humanos más básicos y elementales? Mientras la Comunidad Mundial camina hacia la construcción de distintas plataformas políticas, sociales, económicas y culturales donde predomine la inclusión, la erradicación de marginación, de discriminación. La FIFA coherente con su fascismo está dispuesta a cortar las piernas a más de la mitad de bolivianos. Consecuente con su feroz autoritarismo enfrenta uno de los capítulos más oscuros de su historia: ACABAR con el fútbol en una importante región del planeta. Mientras tanto no emana ni una interjección frente a las agresivas muertes en cancha y fuera de ellas.

Hay mucho que hablar en torno a este acto dictatorial. Sin embargo, es tan perverso que será un insumo más para incendiar el ya incendiado contexto político en el que transitamos. Un elemento más para tensionar en el país la delicada situación entre oriente y occidente. Ya corren rumores, especulaciones, conjeturas: "es que nuestros actuales dirigentes todos son del oriente boliviano", "esto se sabía pero ellos no movieron ni un dedo".

Por último, si el día miércoles en el congreso de la FIFA se ratifica la decisión del Comité Técnico el día 30 de mayo Bolivia tendría que incendiarse entera o por lo menos las ciudades afectadas. No es posible que nos corten las piernas. Vayanse al CARAJO.

No aguanto más pero me mi pequeño fascita me impulsa a madar a la mierda a todos los gauchos putos, vayanse a la mierda cabrones, mediocres, brasileros sidacos síganlos cabrones...

sábado, 26 de mayo de 2007

A los periodistas en su día...

Ayer 25 de mayo además de festejar la victoriosa y compleja independencia revolucionaria de Charcas, festejamos a los tan poco revolucionarios y poco independientes periodistas deportivos.

Sí, sí, ayer fue el día del moralista-mirista Toto y de su hijito, del regionalista Papi y de sus hijitas, del añejo Cuchito Vargas, del meritorio y renegón Tito de la Viña, de los incansables hermanos Etchavarria y de su hijito, del Troglodita Fermin, del jurista bobo Pasten, de Rivera (Quique) y su amigo Funes, de Berdeja, de Murillo, del Sisisisisisisisisisisi y de su Muñeco, de la inteligencia de Heredia y de ese tenaz enemigo del lenguaje: Jorge Figueroa, del aburrido y jubilado juicio de don Carri Lorenzo, del enamorado de la Fox: Colorado Dorado, de los mal imitadores de la FOX y TyC Sports que lo único que tienen en orden es el planchado del terno, me refiero a Sergio Reyes y a su trio de amigos... Me olvido del Ojo Biónico de Lugones.

En fin son ta(o)ntos, pero ta(o)ntos que ninguno destaca respecto al otro. Por el contrario, en torno a ellos es fácil de atraverse a generalizar hasta un punto en el que sin miedo se podría decir que son una inmensa masa de gentes, de voces, de discursos, de palabras, una suma de vendedores de cositas que se superponen unos a otros en el vasto ejercicio mediocre de su carente profesión.

Usted inexistente y hábil lector tal vez se pregunte como me pregunto yo: ¿Por qué no les organizamos una abundante fiestita de elogios y de paso les arrojamos algo de mugre a su aburrida y repetitiva práctica? Sin esperar su respuesta arriesgo con algunos criterios:

Para inaugurar la muestra traigo desde la historia del fútbol la definición mas sabrosa sobre el periodismo deportivo futbolero escrito. La aseveración por su fuerza y lucidez irradia hacia las otras formas del periodismo oral y televisivo. Hace mas de 50 años el gran Obduliuo Jacinto Varela, el gran capitán del corajudo Uruguay del Maracanazo de 1950 profirió una sentencia que hasta el día de hoy no pierde vigencia al momento de abordar la mediocridad en la que se desenvuelve y transita nuestro precario periodismo deportivo. "Los diarios -dice Varela- solo traen dos verdades: la fecha y el precio". Ahondando en esta casi sentencia, ¿que nos ofrecen hoy nuestros medios?

Empecemos por la tele. El guión de los deportivos es tan predecible que uno no necesita ver todos los días sus propuestas periodísticas monótonas y aburridas. Es fácil rastrear aquello que precariamente "ofrecen". Cada vez con mayor intensidad los periodistas deportivos se asemejan a estúpidas estatuas parlantes (estatuas eficaces a la hora de vender desodorantes, singanis, gaseosas, etc.). Repito no se necesita estar al acecho de las opiniones que braman de las bocas de estos caballeros, de antemano es fácil predecir las "sugestivas" lineas de interpretación deportiva. Un ejemplo, antes de escuchar a Arévalo sabemos que dará una lección sobre cómo deben o no deben actuar las barras. Si se trata de Pasten sabemos que traerá algún papelito a mesa y como un Jurista bobo aleccionará a su maltratada audiencia. No quiero hablar de Fermin, que en él la estupidez además de abundar, maneja a este ente como a un ordinario títere de Alasitas.

¿Y el fútbol donde está en todo esto que falsamente llaman "periodismo"? Primero en algún chisme, añadido a la venta de algún fármaco, gaseosa o trago; después puede ser que venga atado a una especulación o chismento; más tarde pegado a la descripción de una tabla de posiciones, añadido a un compendio de goles o a un bombardeo de bloopers ya sea de patadones, de errores al definir, o de tapadas asombrosas de arqueros; finalmente surge en un par de declaraciones limitadas, por los limitados cerebros de los distintos jugadores de la liga y eso fue todo. Acabó el programa. Sobre este esquema se estructuran TODOS los programas deportivos de la televisión boliviana. TODOS, no hay uno que se salve.

Y éste parece ser un vicio contagioso ya que la radio a falta de bloopers avienta a sus oyentes una cantidad abundante de lugares comunes que empañan al fútbol de una pátina que nubla la pasión por el juego. Ejemplos de lugares comunes en la radio. En el programa Gente de fútbol de radio Kana, casi todos los días se habla de los pocos espacios del fútbol actual. No falta en ninguna de las previas de la radio Panamericana (Panamericano deportivo), ni de Erbol, ni de Fides (Fútbol manía) esa cojuda pregunta habitual: ¿Piensas que será un partido difícil? Y eso es todo. En la radio un comodín muy usado por los beneficios mediáticos y populistas es abrir el medio a la opinión telefónica, que, cabe decirlo, es mucho más productivo testear lo que opina la gente que las sabrosas sentencias de estos entes que opinan bajo el manto monolítico de su aburrida práctica.

Chesterton hace muchos años profirió un salvaje comentario sobre la prensa escrita, dijo que es "el arte de llenar los espacios vacíos que deja la publicidad", seguramente que Chesterton tuvo la felicidad de no leer nunca los desastrosos deportivos de La Razón, de la Prensa, del Deber. Dichoso él, ya que en ellos lo que menos aparace es escritura y menos aún fútbol. Pero, hay más que decir sobre el arte de llenar los espacios vacíos que deja la publicidad. Parece que todo el periodismo deportivo tiene esa única misión. En otras palabras gira sobre ese eje.

El fútbol es víctima además de una hueste corrupta e ineficiente élite dirigencial, también es víctima de una otra hueste pedante que hace muchos años ha secuestrado el juego y sobre él ha montado un aparato comunicacional vació, fatuo, inconsistente (boludo, para decirlo de manera más concreta). En otras palabras, ha instaurado una maquinaria para atraer y producir dinero en distintas proporciones y cantidades. Parece que hablar todos los días, todos los meses y todos los años sobre fútbol carcome hasta la última neurona y, sobre todo, borra y anula la pasión por el maravillo juego de la pelotita. A un día de su aniversario no me queda nada más que arrojarles un sonoro (escupitajo!!) y respetuoso:

BUUUUUUUUUUUUHHHHHHH!!!!

Caballeros Aprendan a ser más humildes, no sólo se preocupen de planchar el terno, vean más fútbol, entréguense al juego, no sólo lo vendan, lean más sobre fútbol, por favor LEAN, vayan por lo menos uno vez al mes al fútbol, o si van dejen en boleterías sus vetustos instrumentos de análisis, abandonen los lugares comunes, investiguen alguito si es que no quieren ser absorbidos en la instrascendencia en la cual transitan tan tranquilos.

En este día les mando un abrazo de Autogol (en un honor a ese grande que es Perfumo).

domingo, 20 de mayo de 2007

Sustancias prohibidas

Hablar de marihuana y fútbol no es echar en vano contagioso humo a los rumores que este texto entre líneas pretende incentivar. Se trata de un binomio productivo tanto para entrar a la cancha como para atravesarla. No en vano se juega en un extenso entramado verde.

Para remover las neuronas que vinculan a la marihuana y al fútbol recordemos a los The Wailers, en ese documental sobre la banda de Bob Marley, jugando un picadito de fútbol, arrastrando las rastas y amagando a los inexistentes contrarios verdes. En un primer plano, Marley daba una de sus más lucidaz entrevistas, ostentanto un viejo buso adidas de los 70, típicamente futbolero.

Leo Fernández no es un jugador cualquiera. Llegó al oriente boliviano hace más de diez años. Desde el inicio demostró que dentro suyo tiene un motor proclive a incendiar de locura a todo lo que esté a su paso. Simuló un casamiento con una cruceña simplemente para obtener la nacionalidad boliviana, Simuló un atentado con balas incluidas, Golpeó a un dirigente de Blooming (hizo parar el bus que trasladaba a los jugadores de Oriente, bajó de él, rabioso, directo a golpear al dirigente paquidérmico), se Sacó una foto detrás de su arco con Ronaldinho en medio partido entre las selecciones de Brasil y Bolivia en tierras brasileras... Con él en el arco Chacarita perdió la categoría en el difícil campeonato argentino... Son varias locuras...

Lo del doping es una telaraña difícil de desentrañar, es evidente que si uno ata cabos entre ellos se atisba algo de coherencia... Es decir, hay intereses en el dopping por más que se quiera institucionalizarlo.
En el caso de Fernández era predecible que alguna sustancia peligrosa brote de su orina, lo que no era predecible era el positivo por marihuana... Y el día en que dio el positivo: Oriente perdió 9 a 2.

La marihuana dicen que te aclara los reflejos, te mejora el apetito y organiza un festín bullicioso de neuronas. En el caso de Fernández parece que todo salió al revés...

Basta de todo esto, iré a oír a los Wailers,

mientras sueño un fugas aleteo en medio del verde...

lunes, 14 de mayo de 2007

Rumbo a los 100 años (4)

La derrota en el Tigre debe abrir con urgencia alguna senda, alguna sangría (aunque sea remota o parcial) de lucidez, que trace algún tipo de respuesta coherente del estrepitoso fracaso del pésimamente llamado DREAM TEAM atigrado. Que esta crisis despierte la responsabilidad de todos: de hinchas, dirigentes, jugadores, cuerpo técnico, periodistas. Ya es hora de que alguien, no importa quién, empiece o empecemos a construir una explicación, aunque sea precaria, de este bochorno, de esta VERGÜENZA, a esta altura ya imposible de sostener.

La historia del Tigre es la historia de una compleja y difícil pasión; historia que sólo se hace legible por nuestra incomparable e inimitable Garra (palabra inexistente en este equipo actual que carece de actitud, de carisma, de GARRA, de sincronía, de identidad, de espesor, de porte). Sabemos que Pacheco y Cía. son cabezas totalmente incapaces de ordenar, de darle cohesión a las piezas de este doloroso desmoronamiento. Ellos no armarán este puzzle invadido de derrotas. Tampoco tienen la respuesta a esta debacle que se la siente hasta los huesos amarillo y negros. La gran pregunta que nace de este desastre atigrado es: ¿Quién tiene la garra necesaria para reconstruir estos escombros de equipo, de institución? ¿Quién se atreve a bucear por debajo de esta inmensa derrota? ¿Quién posee alguna clave para afrontar el desastre futbolero que vivimos de fecha en fecha? ¿Será que Villegas lejos ya de la cancha y de las cámaras posee la respuesta y la tiene encerrada en su maletín? ¿Será Ángulo quien tiene la receta para llevar al Tigre a la cima? ¿Será que estamos sufriendo el duelo de la triste ausencia de la Garra del gran Chupita Riveros? ¿Será que este Tigre merece una miluchada general? ¿Quién tiene alguna respuesta? (Con certeza Pacheco no, quien ante la impotencia de imaginar un proyecto ha cambiado cínicamente a más de 7 técnicos en menos de dos años: Galarza, Villegas, Barrientos, Luna, Chilavert, nuevamente Villegas, Berdeja) ¿Quién podrá construir un proyecto futbolero boliviano con algo de coherencia y en perspectiva de algún horizonte? (Esta pregunta parece un llamado al Chapulín, no al Cardozo) ¿Será hora de que los hinchas nos organicemos, quiénes? ¿El actual equipo del Tigre se merece tanta pasión futbolera? ¿Acaso no es una mentira más de las tantas que hay en nuestro mediocre fútbol? Dejemos de buscar Chivos expiatorios. Desactivemos entre todos las trampas en las que nos hunde la derrota... Sin embargo, no puedo dejar de mencionar estas dos últimas preguntas: ¿Será Pacheco quién tiene por lo menos una leve intuición de los pasos que hay que dar para salir de este hondo pozo? ¿No le dimos demasiadas oportunidades donde nos demostró lo contrario? Ayyyy!!!

domingo, 13 de mayo de 2007

Rumbo a los 100 años (3)

Soy consciente que esta tarde el Tigre puede perder con el peor equipo del campeonato. Eso está claro, cualquier resultado contrario al nefasto pronóstico no aclarará el nublado panoramos del Club. No tenemos timón ni dentro, ni fuera de la cancha. Tanto el equipo como los hinchas, hemos perdido el carisma, la garra, el autoestima, de a poco nuestros colores se diluyen, se evaporan en la soleada cancha del Siles. La gestión de Pacheco tiene que acabar pronto, ya es hora de que suelte el botín del CLub, que sólo es utilizado para satisfacer sus intereses mediáticos y políticos.

Esta tarde no pisaré la cancha en señal invisible de protesta.

Textos (2)

Aconsejo leer este texto del siempre genial Ezequiel Fernández Mores:

Napoli y Maradona: lo intenso es eterno

Toda Nápoles celebró este jueves los veinte años del primer scudetto de su historia. Entrevistas radiales, programas de TV, lanzamiento de libros y titulares de primera plana recordaron la fiesta del 10 de mayo de 1987, con casi 85.000 personas colmando el estadio San Paolo y gritándole a Italia que el sur también existía. Pero tanto Diego Maradona como el Napoli están lejos hoy de aquellos tiempos dorados. Uno víctima de sus adicciones y el otro luchando para salir de la Serie B. Peor, aunque pocos lo digan, está sin embargo la ciudad. Nápoles se ha convertido en estas dos últimas décadas en la ciudad más violenta de la Unión Europea, con más de 2700 homicidios en ese período. Y pasó a ser también el principal mercado de droga del Viejo Continente. Si alguien cree en el fútbol como herramienta de trasformación social, el Napoli del scudetto ´87 no significa justamente el mejor ejemplo.
Los que no se sumaron a la fiesta del ?87 cuestionaban criticando porque los éxitos del fútbol, según decían, sólo servían para distraer y tapar la miseria de Nápoles. Y recordaban a Maradona como un campeón arrogante, drogado y amigo de la camorra, poco ejemplar para los jóvenes. Pero los éxitos se fueron junto con Maradona. Y Nápoles está hoy peor que entonces, más condenada por un orden social que, al igual que en el resto del planeta, ha hecho más ricos a los ricos, y más pobres a los pobres. Allí no llega el Estado. Sí llega en cambio la Camorra, que duplicó la cantidad de clanes en los últimos veinte años, de 67 a más de 120. Un ejército de 10.000 afiliados y 50.000 personas vinculadas a sus negocios ilícitos, que significan una facturación de 28.451 millones de euros. El narcotráfico deja 16.459 millones, la obra pública 5878 millones, la prostitución 587 millones, la usura 4703 millones y el tráfico de armas 824 millones.
Los datos fueron extraídos de un documental efectuado sólo unos meses atrás por el periodista argentino Rubén Oliva, hijo del célebre médico que más de una vez curó a Maradona y que trabajó con la selección argentina en el Mundial 78. El documental se llama O Sistema y es un notable relato sobre cómo cambió también la Camorra en los últimos veinte años: primero dedicada a la extorsión y al dominio territorial, luego empresaria ganando licitaciones gracias a su control de la política y, finalmente, al día de hoy, la globalización de los negocios, es decir el lavado de dineros sucios ya sea comprando equipos de fútbol o construyendo hoteles. Es cierto, perdió su dominio de casi medio siglo la familia Giuliano. Carmine, el amigo camorrista de Maradona, el que se fotografió sonriente junto con Diego en imágenes que luego recorrieron el mundo entero, murió sin haberse arrepentido, como su padre y hermanos. Las familias que dominan hoy la ciudad son más sanguinarias. La droga ha subido los niveles de violencia. En octubre pasado la ciudad registró su record de homicidios (18) y el gobierno italiano especuló este año con enviar el Ejército a la ciudad. ¿Cómo no recordar entonces aquel tiempo al menos feliz del scudetto del ?87 con Maradona? Para que la hazaña sea más clara a tiempos de hoy: sería casi como si Lionel Messi saliera campeón de España con el Getafe, no con el Barcelona. O que Carlos Tevez ganara la Premier League con el West Ham, no salvarlo del descenso.
Aquel Napoli de Maradona se hizo eterno en la memoria de millones de napolitanos. Y de muchos otros italianos también. ¿Cómo explicar, sino, que la colección de diez DVD que ofreció este año La Gazzettadello Sport sobre la vida de Maradona haya registrado la venta de casi un millón y medio de copias, récord absoluto en el mercado italiano, según se jactó el editor de la serie, el periodista Gianni Miná? ¿Qué otro momento de fiesta popular más intenso podrá recordar hoy Nápoles, con sus récords de criminalidad y casi un tercio de sus habitantes que, si pudieran, elegirían irse de la ciudad? ¿Fue aquel Napoli de Maradona culpable acaso del atraso social? ¿Y podría seguir siéndolo aún hoy, después de veinte años? ¿Cómo no comprender ahora más que nunca que aquella fiesta haya provocado tanto delirio colectivo?
Es cierto, la felicidad del fútbol es efímera. Pero es intensa. Y, según dijo alguna vez Jorge Luis Borges, lo intenso es eterno.

lunes, 7 de mayo de 2007

Rumbo a los 100 años (2)

Triste tarde en el Siles:

Fuera de la Cancha
Las señales están dadas. No se necesita ser un detective experto para palpar las evidentes huellas. A tres o a diez e incluso a cien metros se vislumbra que el Tigre atraviesa una crisis de fútbol muy seria. Son 15 puntos que volaron con piadosas alas del Siles. Espantoso. Espantoso ya que desde diciembre el señor Pacheco no deja de hacer política y demagogia. Desde diciembre que insiste y persiste en hacernos creer que tenemos el Mejor Equipo del Fútbol boliviano. Para los precarios, mediocres, cánones futboleros del presidente Pacheco este equipo debe ser una selección de “estrellas”, que respondiendo a su resplandor debería volar e iluminar cualquier noche atigrada, como la de esta tarde, por ejemplo. Sabemos que Pacheco y Cía saben de fútbol, tanto como de buena administración, de buena gestión, de cuentas claras. El Tigre es un desastre desde su cabeza. Los periodistas cómplices, hábiles en nominar chivos expiatorios dentro de la cancha y al borde la línea de cal, justo ahí donde transita el DT, protegen en sus análisis a esta elite dirigencial que apesta a leguas y manosea los intereses del club inclinando de tal manera la circunstancia que ellos quedan blindados ante cualquier interrogación. Señores: Dejen de manejar el Tigre a su gusto. Aprendan de fútbol, reabran sus bufetes de abogacía, lucren de sus mañas (el señor Arnez abogado de Dante Escobar espera que el Estado boliviano le pague sus honorarios que llegan a sumar casi un cuarto de millón de dólares).
Ahora, me hago algunas preguntas: ¿Quién tiene que evaluar este desastre? ¿Quién debe racionalizar este ciclo futbolístico que se derrumba a pedazos? ¿Quién debe imaginar las salidas de este puto callejón? ¿Quién tiene que fortalecer la crisis emocional, intelectual, creativa del equipo? ¿Los jugadores, Berdeja y su cuerpo técnico, los dirigentes, los hinchas? ¿Quién? Seguramente que las responsabilidades tienen que repartirse, pero quién hace esa repartija. El Tigre sufre de una carencia dirigencial, no hay timón que define una ruta, vislumbre un horizonte. Una dirigencia totalmente incapaz de bajar a la cancha para parar las derrotas o para construir a partir de la derrota, que finalmente es lo más importante. Pero nada. Pacheco y Cía. se lavaron las manos una vez más entregando al cuerpo técnico la total responsabilidad de este equipo carente de fútbol, de ideas, de emociones, de responsabilidad, de creatividad, de tenacidad. A Pacheco le interesa la demagogia, por eso ahora está empecinado en entregar tarjetas a ancianos y a niños como carnets de partidos políticos. La gente volverá a la Cancha si es que en frente ve a un equipo que desde sus entrañas responda a un proyecto de FÚTBOL, repito: de FÚTBOL. Estamos hartos de que se utilice al club como una plataforma de reposicionamiento político. Como estos caballeritos están lejos del poder de la Plaza Murillo no quieren dejar de manipular, de tocar el poder, y para eso está el Club. Basta señores, BASTA!!!!

Dentro de la Cancha
Decir que el Tigre jugó desastrosamente es no decir nada. Decir que expuso una insuficiente garra, diversas ráfagas de inutilidad total, espasmos futbolísticos que sólo emergen en equipos chicos es ser redundante. Manifestar que en el juego se desordenó en todas las líneas y sufrió por una ausencia total de fútbol ya resulta poco original. Finalmente, aceptar que atraviesa una crisis de ánimo es repetirse casi hasta la necedad. Los partidos pasan, los rivales desfilan, se acerca el final del campeonato y las costumbres atigradas no cambian. No quiero hilar fino sobre la desastrosa tarde. Simplemente diré que Escobar es un nudo de angustias, hace mucho tiempo que no da gusto verlo jugar, dejó de ser el creador vertiginoso de juego y se transformó en el 10 más eficaz en pases truncos. No da fluidez, ni es la herramienta del juego vistoso y virtuoso, ya no sorprende, no tiene cambio de ritmo, y repito en él manda la imprecisión. El Chapi Cardozo hizo un partidazo en Potosí, hoy además de estar durante todo el partido pésimamente ubicado no generó nada de fútbol, menos sorpresa. Galindo es sumamente intermitente, predecible, además carga con una extraña maldición ya que de sus errores nacen los goles contrarios (el primer gol de Real Potosí nace de uno de un error marca Galindo). En el tigre Jara hila a su paso un conjunto de lesiones, de desgracias: del cuello al hombro. Nunca entendí el porqué está en el Tigre. Lo confieso: NUNCA. Tanto los volantes de contención, como la defensa demostró que le faltan mañanas y tardes de trabajo. No diré más. Excepto que creo que Berdeja es un tipo capaz de remontar este desastre, sin embargo, ya debe palpar que el desastre también se encuentra en la dirigencia. Lo último que diré, a riesgo de repetirme, es que todo indica que hay problemas, evidentes problemas en el Tigre. Ya es hora que vuelva al equipo la audacia, la rebelión táctica bien entendida, ese deseo de querer ganar.

domingo, 6 de mayo de 2007

Semana futbolera I

La semana que se va fue densamente futbolera. Expuso el espesor del juego, las distintas dimensiones de lo que apasionadamente es el fútbol. El martes: en simultáneo se homenajeó a Oscar Sánchez en el Siles y se jugó en la cancha de Liverpool la semifinal de la Champions. El miércoles se jugó la segunda semifinal entre Milán y Manchester, más tarde en México jugó América y Colo Colo y en Buenos Aires el Gato Sessa casi se queda con el ojo y un fragmento de cerebro de Rodrigo Palacio. El jueves se jugó lo que a mi modo de ver fue el mejor partido de la semana (exceptuando algunas ráfagas de brillante juego de Riquelme en el Boca - Vélez) y fue en Potosí: Real Potosí y el Tigre. (Me olvido de otros partidos a los que ya no daba el cuero para observarlos: por ejemplo, la semifinal de la UEFA, varios partidos de la copa libertadores: Cucuta – Toluca, al que Cucuta goleó a Toluca de forma aplastante, entre otros). Pero, como siempre, vamos por partes.

Melancólica tarde de Martes en el Siles:
Estamos a pocos meses de celebrar la decena de años del último “buen resultado” de la selección boliviana: el segundo puesto en una modesta Copa América (Bolivia - 1997). Aunque la final fue muy emocionante por ver a la selección brasilera –casi la misma que jugó frente a la Francia de Zidane un año después en la final del mundo– fue un campeonato de poquísima trascendencia ya que la mayoría de las selecciones sudamericanas no se tomaron en serio a la Copa y mandaron selecciones improvisadas a simplemente cumplir el compromiso con la Comebol. Cerca de ese aniversario el martes primero de mayo (día en que celebramos la lucidez de los anarquista de Chicago mal llamados mártires que murieron no por sus actos, sino porque el juez señaló que la inteligencia de estos hombres era tan poderosa que iba a ser perniciosa para el interés de las elites que secuestraron el poder y lo ocultaron bajo sus fauces) se reunieron en cancha la mayoría de jugadores que participaron en esa Copa y obviamente en la meritoria e inolvidable clasificación del 93.


Entre nubes, algo de viento y en una atmósfera enrarecida y algo mortuoria (el acto se llenó de una cantidad de gestos tristes e impertinentes, la pesada familia Valdivia –dueños de la famosa funeraria– hicieron una malísima canción a Oscar a modo de un preludio negativo). Al margen de esta vergüenza digna de un bochorno fue emocionante ver a Etcheverry con una habilidad descomunal para derrochar alegría en la cancha, ni que decir de Miltón Maravilla Melgar quien demostraba que el fútbol más que fuerza es una exposición de elegancia y de altas dosis de inteligencia, a Erwin Sánchez que sabe lo que es desplegar una pasión, a Calichín Morales al que se nota que el fútbol no lo deja, a leguas se trata de un crack que nació antes de tiempo, a Angola que como decía David Heredia (en la ERBOL) está listo para jugar o en La Paz F. C. o en el Tigre o en el necesitado Bolívar. Fue tanto el talento del yungueño que el limitado beato del fútbol (me refiero al nefasto Sandy) le dio un rodillazo bravucón como muestra de lo que más sabe de fútbol: destruirlo. Al Presidente Morales le pesó la cancha, pero vertió en ella todo su carisma, lo que no es poco. Algo que me sorprendió es que fue duramente silbado en algunos momentos.

Martes y Miércoles a la misma hora y en distintas canchas:
Confieso que el partido entre Liverpool y Chelsea me pareció demasiado largo, redundante, fatigoso; demasiado estudiado y cauteloso. Aunque entre el duelo técnico-táctico Rafa Benitez nuevamente dio una lección de estrategia futbolera al desgastado Mourinho. Del Milán – Manchester: sólo diré que Milán se merece el campeonato (Personalmente quería que sea Manchester pero el miércoles se equivocó demasiadas veces). Dida crece una enormidad cuando juega detrás de los rojos, tiene un jugador de una potencialidad enorme como Gatusso que no deja de luchar en todo el partido. Además de tres creadores: Kaká, Pirlo y el brillante Seedorf. Tiene un equipo muy bien estructurado para ser campeón, pero sobre todo se sabe campeón, ventaja indestructible.

Miércoles noche, entre una patada y múltiples filigranas:
Del Boca – Vélez, no quiero hablar ni del protagonismo exagerado de Lavolpe, ni de la diplomacia de Russo (al que le agradezco haber descubierto el talento de Raldés, él fue quien lo llevó a Rosario Central). Tampoco del patadón del Gato Sessa a Palacio (reproduzco in extenso en una nueva entrada el texto de un amigo argentino sobre el bochorno).

Quiero hablar del genio de Riquelme. Lo primero que diré es que su estilo funciona como una brújula demasiado eficaz para llevar a Boca al vértigo incesante del Ataque. Pero no se trata de cualquier Ataque, tiene una capacidad para el toque y no sólo para ello sino para desplazarse y recibir la pared o producir el misterio de un caño o es capaz de producir un cambio de frente que desconcierta. Ojo eso sí además de todo eso no deja de ordenar al equipo. Con él en la cancha trepa Clemente, exige Palacio, transpira Ledesma, salta a la cumbre Martín, aprende Banegas, marca Silvestre... Algo de veneno tiene en su zurda que devuelve balones embarrados de una pátina de fuego imposible de predecir su destino y menos aún de parar su implacable recorrido. Es Riquelme.

Jueves noche, entre muchos Vicuñas y pocos Vascongados:
Potosí en estos dos últimos años se ha transformado en el escenario donde se ve muy buen fútbol. ¿Qué entiendo por buen fútbol? Esa suma de capacidades entre técnicos, jugadores e hinchas que transforman la cancha en un espacio para demostrar inteligencia táctica, exquisitez técnica, lucidez para producir con el cuerpo y una pelotita gestos poéticos, fortaleza física, trabajo, pero también imaginación, creatividad, responsabilidad, amor a la camiseta, valentía, Huevo, espíritu aventurero, capacidad para manejar tiempos, equilibrio táctico para distribuir las cargas en el equipo... Todo esto se vio el jueves entre el Tigre y Real Potosí. Para semejante afirmación se exige relevo de pruebas: basta una se concretaron 7 goles. No quiero entrar en detalles ya que hoy domingo se juega la segunda parte de este partido en La Paz... Mañana escribiré un texto que recoja las hazañas de estas dos gestas.

El fútbol es una compleja maravilla que gira en el vértigo de una esfera...

Textos (1)

La patada del Gato Sessa a Palacios es el motivo para explorar interesantes aristas sobre el fútbol, les presentó el texto de Dante Palma sobre la agresión...

De hinchas e hipocresías
Sobre la patada de Sessa
por Dante Augusto Palma


En esta nota me voy a referir al episodio del que está hablando el país entero: la patada voladora que el arquero de Vélez, Gastón Sessa, le propinara al delantero de Boca Rodrigo Palacio. Para que no se malinterprete lo que voy a decir debo aclarar: rechazo profundamente la actitud de Sessa no sólo en este caso sino en muchos casos anteriores. Esta pueda generar lesiones en colegas, afecta deportiva y económicamente a sus compañeros y a su club, genera violencia dentro y fuera del campo y resulta una desilusión muy grande para los hinchas de su club, en este caso, Vélez.
Ahora bien, lo que me interesa remarcar, por lo pronto, es el trato desmedido y exagerado que este hecho ha tenido. No habiendo pasado aún 24 horas del episodio, pude tomar nota de: encuestas radiales varias acerca de si Sessa debe seguir atajando o no; constante difusión de foros en Internet en que los hinchas de Vélez se expresaban; una incesante cobertura del episodio y de sus consecuencias en los informativos de las principales radios AM (La red, Continental, Mitre, etc.) cada media hora; un informe de más de unos 8 minutos en Telenoche titulado “Todo tiene un límite” acompañado de un móvil en vivo en la puerta del club esperando la reunión de la Comisión Directiva de Vélez que determinará el futuro del arquero; la tapa de los principales diarios amplificando hasta lo inimaginable el fenómeno (en Olé la única foto de tapa es la del incidente y en Clarín es la foto de tapa que secunda a otra en la que se atestigua el festejo de Palermo); Eduardo Feinmann que junto a al conductor del noticiero del 9 afirmaron que la patada fue “criminal” (SIC) y demencial; Niembro, en su eterna militancia acerca de una supuesta profesionalización del fútbol, operando en favor de la inclusión de psicólogos que puedan evitar estos exabruptos; decenas de móviles esperando al técnico de Vélez, Lavolpe, a la salida del entrenamiento de hoy por la mañana en la Villa Olímpica para preguntarle por el caso; etc, etc. (seguramente el lector podrá agregar hasta casi el infinito otras coberturas que mi tiempo y mis posibilidades horarias me impidieron advertir). Por si esto fuera poco, el abogado de Chabán, y reconocido hincha de Boca, realizando una denuncia por “agresiones” y pidiendo a un fiscal que actúe de oficio. Todo el mundo tenía y tiene una opinión para dar sobre el hecho y todo el mundo “sabe” lo que se debe hacer. Incluso sobraron los comentarios en los medios que trataron de hacer una interpretación socio-filosófica de la argentinidad a partir de este suceso. Una especie de sociedad “Sesseada”, marcada por la violencia y el exabrupto. Así Sessa parece ser una de esas figuras tan caras al romanticismo en las que se resume el sentido de una época.

En esta nota me voy a referir al episodio del que está hablando el país entero: la patada voladora que el arquero de Vélez, Gastón Sessa, le propinara al delantero de Boca Rodrigo Palacio. Para que no se malinterprete lo que voy a decir debo aclarar: rechazo profundamente la actitud de Sessa no sólo en este caso sino en muchos casos anteriores. Esta pueda generar lesiones en colegas, afecta deportiva y económicamente a sus compañeros y a su club, genera violencia dentro y fuera del campo y resulta una desilusión muy grande para los hinchas de su club, en este caso, Vélez.
Ahora bien, lo que me interesa remarcar, por lo pronto, es el trato desmedido y exagerado que este hecho ha tenido. No habiendo pasado aún 24 horas del episodio, pude tomar nota de: encuestas radiales varias acerca de si Sessa debe seguir atajando o no; constante difusión de foros en Internet en que los hinchas de Vélez se expresaban; una incesante cobertura del episodio y de sus consecuencias en los informativos de las principales radios AM (La red, Continental, Mitre, etc.) cada media hora; un informe de más de unos 8 minutos en Telenoche titulado “Todo tiene un límite” acompañado de un móvil en vivo en la puerta del club esperando la reunión de la Comisión Directiva de Vélez que determinará el futuro del arquero; la tapa de los principales diarios amplificando hasta lo inimaginable el fenómeno (en Olé la única foto de tapa es la del incidente y en Clarín es la foto de tapa que secunda a otra en la que se atestigua el festejo de Palermo); Eduardo Feinmann que junto a al conductor del noticiero del 9 afirmaron que la patada fue “criminal” (SIC) y demencial; Niembro, en su eterna militancia acerca de una supuesta profesionalización del fútbol, operando en favor de la inclusión de psicólogos que puedan evitar estos exabruptos; decenas de móviles esperando al técnico de Vélez, Lavolpe, a la salida del entrenamiento de hoy por la mañana en la Villa Olímpica para preguntarle por el caso; etc, etc. (seguramente el lector podrá agregar hasta casi el infinito otras coberturas que mi tiempo y mis posibilidades horarias me impidieron advertir). Por si esto fuera poco, el abogado de Chabán, y reconocido hincha de Boca, realizando una denuncia por “agresiones” y pidiendo a un fiscal que actúe de oficio. Todo el mundo tenía y tiene una opinión para dar sobre el hecho y todo el mundo “sabe” lo que se debe hacer. Incluso sobraron los comentarios en los medios que trataron de hacer una interpretación socio-filosófica de la argentinidad a partir de este suceso. Una especie de sociedad “Sesseada”, marcada por la violencia y el exabrupto. Así Sessa parece ser una de esas figuras tan caras al romanticismo en las que se resume el sentido de una época.